Convirtiéndose al Juego de Posición
“Este juego consiste en ir generando superioridades a la espalda de la línea que te aprieta. Todo es más fácil si la salida de balón es limpia”
Juan Manuel Lillo

Carlos Restrepo y Oscar Salgado están convirtiendo a los jugadores olimpistas al juego de posición, entendiendo que desarrollar este modelo conlleva tiempo y es un proceso donde se deben dejar hábitos y automatismos pasados para generar nuevos. Practicar éste modelo precisa no solo de jugadores con dichas características sino de futbolistas comprometidos con la idea.
El entrenador olimpista tiene un gusto por la escuela del juego posicional, es de amplio conocimiento que la mayoría de los entrenadores colombianos apuestan por el juego combinativo. Y el ex entrenador de las reservas olimpistas, multicampeón con dicha categoría, es reconocido en el mundo de entrenadores por su conocimiento estricto y metódico del juego de posición.
El torneo pasado fue un momento donde se interrumpió el juego directo del Olimpia, un juego que tiene formas e interpretaciones de ubicación que distan mucho del que desde hace un torneo se está implementando. Para comenzar los cambios que Restrepo está efectuando una salida de balón por bajo en su mayoría de encuentros a diferencia del año pasado donde se buscaba como referencia a Costly por su altura. Los cambios no pueden ser radicales sino que se tienen que dar las condiciones para que existan.
Esta salida de balón es acompañada por un central como Jonathan Paz, que tiene muy buena técnica y visión de juego. El defensa intenta buscar interiormente a Gerson Rodas o principalmente a Germán Mejía para salir por dentro. No se proyectan tantos los laterales o se dan amplitud como se establece en la Salida Lavolpiana, ingeniada por Ricardo Lavolpe, donde se busca laterales profundos y amplios. Por el momento Restrepo y Salgado van paso a paso, subir los laterales en la salida de balón implica un riesgo enorme de falta de apoyos para el posible receptor y poseedor del balón.
En la construcción del juego, el Olimpia junta sus mediocampistas en forma de rombo, el más posicional es Mejía, el Patón está más retrasado que Gerson Rodas y Bryan Moya, por una posible pérdida o para implementar la presión tras pérdida mientras que Gerson Rodas y Bryan Moya junto a Diego Reyes ( que retrasa su posición) y Michael Chirinos (que juega por dentro en momentos del partido) permutan: cambiar de posiciones en transiciones ofensivas.
Rodas por momentos en una labor de interior con mucha amplitud para liberar espacios centrales, proyectando así mismo a Reyes que retrasa su posición para unirse al rombo central. La labor del nuevo jugador del Olimpia es vital ya que sin sus movimientos no hay movilidad para atacar las espaldas del rival. Moya es un hombre libre, que busca pases verticales para sus compañeros más profundos.
El punto más determinante e interesante de éste rombo en el mediocampo es la incorporación de Michael Chirinos a jugar por dentro. Determinante, porque fija a sus rivales con la conducción y en esa atracción que realiza libera espacios para sus compañeros, que también están agrupados para una posible presión tras pérdida. Así mismo libera su carril para proyectar a su lateral al ataque. Interesante, porque no se tiene registro del extremo jugando por dentro y reluciendo de esa manera.
¿Y Carlo Costly? El veterano delantero participa como referencia de área, él también atrae a rivales por su altura, al mismo tiempo se bota a los lados para crear espacios frontales. Sus movimientos de atracción serán fundamentales para el juego olimpista, ya que él es un eje profundo, siendo no solo referencia sino también la principal fuente de goles olimpista.
fuente de imagen:LaPrensa.hn